Escribo estas líneas en medio de un nuevo temporal que azota la ciudad. No han transcurrido ni 20 días desde el momento que un huracán atravesó el distrito, provocando la caída de decenas de árboles, y voladuras de techos y cartelería, privándonos del fluido eléctrico por espacio de 2 semanas.

La respuesta de Defensa Civil local, al igual que en 20212, con el Gobierno en manos de Mariano West, fue lenta y desorganizada. En primer lugar, la falta de previsión del fenómeno que ya había sido anticipado por el servicio meteorológico nacional, que comenzó en Bahía Blanca y cruzo la provincia en diagonal para llegar al noroeste del Conurbano bonaerense cerca de las 4 del domingo 19 de diciembre.

En segundo lugar, la ausencia total de presupuesto para la institución, que por regla general debe estar abastecido por el Municipio, tanto de hombres como de máquinas e implementos necesarios para paliar la catástrofe.

Pero, es como pedirle peras al olmo, ya que este Municipio de 184 kilómetros cuadrados, no cuenta con la cantidad necesaria de camiones para levantar los restos de poda y la basura a cielo abierto que se acumula a diario cada 2 o 3 manzanas. Tampoco hay en existencia desmalezadoras, ni motosierras, ni maquinaria pesada para levantar los troncos que quedan tendidos sobre las calzadas.

Las malas lenguas hablan de la existencia de un deposito en Cuartel V, propiedad del municipio o de las cooperativas truchas de Mariel Fernández y "El Gringo" (a esta altura son lo mismo); plagado de herramientas de mano en desuso o descompuestas.

Todavía oigo las sirenas de fondo, mientras la lluvia una vez más deja inundada toda la ciudad. Nuevamente es domingo y de un verano súper caluroso, situación que mitiga bastante la desazón de mañana cuando haya que salir a trabajar. Otra vez oiremos la queja en los medios de comunicación, de estos mismos ciudadanos de Moreno, que han vuelto a favorecer a este Gobierno local, no solo corrupto sino también inoperante.

Las cuentas del Municipio están exhaustas, hasta el plazo fijo de 800 millones que tenían de reserva se ha esfumado. Es que Mariel Fernández se gasta unos 3 mil millones de pesos al mes en sueldos de una cantidad desconocida de funcionarios y empleados. Para colmo ya no manejan ni distribuyen los "Potenciar Trabajo".

Son eso mismos planes, que el Gobierno nacional comenzó a dar de baja, unos 4500 ya han quedado sin efecto, restan unos 160 mil, son en su gran mayoría del Movimiento Evita, todos con vicios varios, unos 28 mil salieron del país en reiteradas oportunidades, a llevarse como mulas los 10 mil dólares por persona permitidos, para engrosar las cuentas en el exterior de la organización irregular; que soñaba convertirse en partido político y tal vez terminen como sociedad anónima.